Detrás del evidente e ingenuo contraste del título, se esconde una realidad que puede resultar muy limitante para mucha gente. Así es, el hecho de que el jabón y los bioalcoholes sean nuestra principal salvaguarda contra el tan temido COVID-19 favorece o agrava las dermatitis (o eccemas) de manos. Recordar que se debe realizar un lavado minucioso tanto de palmas como de dorso, entre los dedos y en las caras laterales. Se sugiere que dure entre 40 y 60 segundos.

Se estima que 1 de cada 10 personas padece de algún tipo de dermatitis en las manos. La forma más frecuente es la dermatitis de contacto, que puede ser irritativa o alérgica. La primera se asocia al empleo reiterado de sustancias agresivas para nuestra piel (jabones, detergentes, ácidos, álcalis…) mientras que la segunda puede ser consecuencia de la primera y darse más habitualmente en ciertos ambientes laborales (sanitario, textil, peluquería, limpieza…). Otros factores o causas a tener en cuenta son la dermatitis atópica y el estrés.

Las manos pueden aparecer con inflamación, con descamación, con exudación e incluso agrietadas. Es en este punto donde, a veces, hay que recurrir a tratamientos orales (antihistamínicos y/o corticoides) para su control. Para evitarlo, como medida de prevención, hay que secarse bien las manos y, sobre todo, insistir en el uso de guantes de algodón por debajo de los de uso común, guantes de nitrilo o de vinilo, siendo los primeros en general los más recomendables.

La utilización recurrente de cremas hidratantes, tal y como adelantábamos en anterior blog, es otra herramienta importante. Los remedios caseros tales como “l’oli de pericó” –tan reconocido en nuestra zona- pueden ayudar. No se deben emplear cremas que contengan urea si hay fisuras o exudación, dado que pueden provocar más picor y ardor. En las circunstancias actuales, serían el tratamiento de primera línea, junto con o sin corticoides tópicos, pues éstos se pueden prescribir ininterrumpidamente durante 15-20 días, requiriendo de períodos de varios días de descanso.